Corría el año 936, cuando comenzaron las obras de la ciudad palatina de Madinat Al-Zahra. Mandada construir por el primer califa de Córdoba, Abd- Al Rahman III. Madinat Al-Zahra fue la ciudad más importante de Occidente en el Siglo X, el siglo de oro del califato cordobés.
Mucho se ha hablado del origen de esta ciudad, historia y leyenda se mezclan y hacen de esta ciudad, un lugar mágico y que merece la pena conocer. Desde Tu guía en Córdoba soy fiel a la historia, pero las leyendas me encantan (¿y a quién no?) y por eso hoy voy a hablaros de ambas.
HISTORIA DE MADINAT AL-ZAHRA
Abd- Al Rahman III fue proclamado emir tras la muerte de su abuelo, Abd Allah. No era el heredero legítimo al trono, pero fue respetado por los hijos de Abd Allah que no pusieron impedimentos para cumplir la voluntad del emir. Con 21 años, Adb- Al Rahman se hacía cargo del Emirato de Córdoba, que no pasaba por su mejor momento.
Sobre el reinado de Abd- Al Rahman, la Crónica anónima de Al- Nasir lo define así:
“Conquistó España ciudad por ciudad, exterminó a sus defensores y los humilló, destruyó sus castillos, impuso pesados tributos a los que dejó con vida y los abatió terriblemente por medio de crueles gobernadores hasta que todas las comarcas entraron en su obediencia y se le sometieron todos los rebeldes “
Los éxitos cosechados durante sus primeros 20 años como emir, le animaron en el año 929 a romper definitivamente con el Califato de Bagdad y proclamarse Califa, líder terrenal y espiritual de los creyentes.
Con el Califato cordobés instaurado, Córdoba se convirtió en uno de los estados más poderosos de Occidente, labor que continuó su hijo Al-Hakam II.
¿Por qué el califa mandó construir Madinat Al-Zahra?
Su construcción formó parte del cambio político, económico e ideológico que vivió Córdoba con la proclamación del Califato. La dignidad de califa exige la fundación de una nueva ciudad, como ya hicieron sus antepasados en los califatos orientales. Además, esta nueva ciudad, supone también una muestra de superioridad ante sus enemigos, abasíes y fatimíes. Con su construcción, verían la grandeza del nuevo califa y su poder.
Así comenzó la gran obra de Abd- Al Rahman III, construyendo una nueva ciudad que se conocería con el nombre de Madinat Al-Zahra. La nueva ciudad se convertiría en residencia califal, capital del califato y sede de su gobierno. Y en ella vivirían los futuros califas de Córdoba hasta su destrucción en 1013.
No cabe duda, de que Abd- Al Rahman III supo elegir el lugar donde construirla. A 8 kms de Córdoba, la ciudad se construyó en una ubicación privilegiada a los pies de la “Sierra Morena” cordobesa, con una altitud que le permitiría contemplar la ciudad de Córdoba y controlar el valle del Guadalquivir ante posibles ataques enemigos.
Las obras comenzaron a finales del año 936 y continuaron durante 40 años, aunque la corte se trasladó en el año 945. Para su construcción se contrataron a los mejores arquitectos y artesanos de la época. Se utilizaron los mejores materiales como el ébano, mármol, marfil y piedras preciosas, y más de 10.000 hombres trabajaron para edificarla.
Aprovechando el desnivel que brindaba su ubicación, se dispuso en tres terrazas o niveles:
- En la terraza superior se construyó la residencia califal, aislada del resto de edificios y que permitía al califa unas inmejorables vistas de la ciudad, del valle del Guadalquivir y de Córdoba.
- La terraza media se destinó a los edificios que serían sede del gobierno, residencias de altos cargos de la corte y salas de recepciones.
- En la terraza inferior, las viviendas destinadas a la gente del pueblo y los soldados. En esta zona se encontraban la mezquita, los mercados, los baños y también los jardines públicos.
Toda la ciudad se encontraba amurallada como protección ante posibles invasiones y se comunicaba con Córdoba a través de la Puerta Norte, de donde partía el llamado Camino de los Nogales.
Nadie podía presagiar que la Ciudad Brillante, residencia de los califas omeyas durante 73 años, fuera a tener un triste final y quedará sepultada y olvidada durante siglos.
LEYENDA DE MADINAT AL-ZAHRA
Como os decía al principio de nuestro post de hoy, hay una leyenda detrás de la construcción de esta ciudad y que estoy segura de que os gustará conocer (si no la conocéis ya).
Era tal el amor que el califa sentía por su concubina Al-Zahra, que mando construir una ciudad en su honor. Abd- Al Rahman contrató a los mejores arquitectos y artesanos, que utilizaron los materiales más ricos para su edificación. El califa ordenó construir grandes jardines con fuentes para su amada, y se utilizaron las mejores telas y muebles para decorar sus aposentos.
Sin embargo, Adb- Al Rahman no conseguía que ella fuera feliz y en muchos momentos la encontraba llorando en palacio. El califa preguntó a su amada que podía hacer para contentarla, a lo que Al-Zahra le respondió que no podía hacer nada para aliviar su tristeza ya que lloraba por no ver la nieve de Sierra Nevada (Granada era la ciudad original de Al-Zahra). El califa no dudo en prometer a su amada, que el lograría que nevara en Córdoba para ella. Y así fue… Mandó plantar un gran jardín de almendros que cada primavera al florecer, llenaban la ciudad “de nieve” para Al-Zahra”
Hay que reconocer que Abd- Al Rahman, sabía contentar a sus mujeres, ¿no os parece?
Y hasta aquí, nuestro primer post sobre Madinar al-Zahra. Espero que os haya gustado y os invito a seguir conociendo su historia a través de mi blog.
Madinat Al-Zahra es uno de los monumentos incluidos en nuestro post: 5 cosas que ver en Córdoba gratis. Podéis leerlo pulsando aquí.
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Un comentario en «Madinat al-Zahra: historia y leyenda de la ciudad brillante»
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